Preparativos de viaje a la República Checa

Este país está situado en el centro de Europa, rodeado por países del este y países de la Europa más occidental. Puede que por eso la República Checa tenga esa mezcla de las dos Europas. Una mezcla en total armonía.

Para muchos este país es solo Praga, pero si das una oportunidad al resto del país, te llevarás una agradable sorpresa y no te decepcionará.

¿Qué todavía no te he convencido? Pues, como curiosidad, los checos son los que consumen más cerveza del mundo. Sí, no pongas esa cara. No es Alemania, no. Además el país vecino sube mucho su media con la Oktoberfest donde se beben más de 7 millones de litros de cerveza en unas tres semanas, de las cuales, los extranjeros somos más responsables que los locales. Aquí los checos hacen su media por méritos propios. Y no es para menos. Su cerveza estrella, la Pilsner Urquell, es la rubia más antigua del mundo y está buenísima.

Pero, ¿qué necesito saber antes de ir a la República Checa? No es que haya que hacer mucho preparativos para ir a este país, pero es bueno saber alguna cosa que otra.

Documentación

No necesitas pasaporte para entrar en la República Checa si perteneces a la UE. De hecho, si vas en coche, puede que ni te lo pidan.

Idioma

Hablan el checo, un idioma muy raro del que no entenderás ni papa. El inglés no te será tan útil como en otros países y es casi más recomendable saber alemán que el lenguaje de Shakespeare o incluso ruso.

Moneda

Usan las coronas checas, aunque en algunos sitios puede que te acepten euros. Eso sí, siempre el cambio favorable a ellos.

Seguro médico

Tampoco se necesita si perteneces a la UE. Eso sí, tendrás que tener la tarjeta sanitaria europea.Si no trabajas en la UE y necesitas contratar un seguro, recuerda que por leer este blog tienes un 5% de descuento con IATI seguros.

La rubia más vieja y más buena

Desde España hay vuelos directos con la compañía checa CSA Czech Airlines. De todas formas también hay buenas opciones haciendo transbordo en algún punto intermedio de Europa.

Coche

Si te pilla cerca como me pasa a mi, es una opción muy recomendable para poder visitar a tu aire el país. Para llevar tu propio coche a la República Checa necesitas tu carné de conducir en vigor, un seguro de coches como mínimo a terceros, la carta verde de tu seguro de coche la carta verde ya no es obligatoria llevarla a los países de la UE si tienes un seguro de coches, aunque yo te recomiendo tenerma por si las mosas, los papeles del coche que acrediten que el coche es tuyo y un botiquín con las cosas básicas.

Además, para circular por las autovías checas, necesitas una pegatina o vignette. Se pueden comprar en las gasolineras checas y el las cercanas a la frontera (yo la compré un poco antes de cruzar). Se puede comprar de 10 días (unos 12€), un mes o de un año. Y hay que pegarla en la luna del coche, que si no te multa aunque la hayas comprado.

Respecto al precio de la gasolina y del diesel, aunque parezca raro suelen valer lo mismo e incluso a veces te encuentras la gasolina más barata. Suele costar el litro entre 36 y 40 25 y 31 coronas (precio marzo de 2016).

Tren

Si vas desde España es un palizón, pero si vas desde alguna otra ciudad del centro de Europa puede ser una opción válida. Mucha gente usa el tren para hacer la típica ruta por Praga, Viena y Budapest. Si este es tu caso, mira en esta página los trenes disponibles.

Números de una misma casa

Y para terminar, casi más como curiosidad, en las grandes ciudades las casas suelen tener dos números. Uno es el número del registro de la casa y otro es el que se pone en la dirección. Ambos designan la casa, pero si pones el GPS para llegar a algún sitio, mejor que metas es que sea más pequeño.